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Mi respuesta

Hay distintas maneras de amar a un país - o más bien una nación , que para mí, Cuba no puede ser únicamente un concepto geográfico o político : ser cubano, es una mentalidad, y los exiliados de Miami son tan cubanos como los militantes castristas o  las mujeres que salieron para fundar un hogar bajo otros cielos, llevándose la nostalgia del país abandonado.     Cada cual la ama a su manera, como se ama a una mujer o a un hijo, a un padre o a una amante, es decir tal vez mal , tal vez con  rabia o con despecho, pero de un modo carnal y esencial. Cada uno está dispuesto a batirse para ella, y el mismo amor que debería unir a todos sus hijos hace que se levanten los unos contra los otros.        ¿Si estoy enamorado de este país? Lo creo, porque dio a mi vida un nuevo significado, y todo lo que viene de allá me afecta en lo más hondo. Pero esta pasión no puede estar vinculada a una circunstancia histórica. Si mi visión de Cuba puede parecer demasiado pesimista, es porque sufro de lo que va mal en ese país que podría ser un paraíso. No podrás negar que han pervertido el espíritu de la Revolución, que estamos lejos de los sueños del Che y de Camilo, y el pueblo está harto de una lucha cuyos beneficios se le robaron. Hay además la preocupación por un porvenir que nada  prepara y  puede desembocar en una total marcha atrás, o en la confiscación del poder por una clase política que está esperando  la desaparición de su líder  para establecer una dictadura que de socialista sólo tendrá el nombre.        Conozco los logros de la Revolución y  sé que en algunos asuntos Cuba representa un ejemplo, sobre todo para los países de América latina . Pero sé el precio que hubo que pagar para obtenerlos y lo que cuesta mantenerlos. Sé también lo que fue sacrificado y lo que sigue siéndolo, y no puedo dejar de estar preocupado por el porvenir de aquellos niños que amo y a los que les han quitado la esperanza.        Pides un apoyo incondicional de lo que queda de la Revolución. Puedo sostener un ideal de paz, de justicia y equilibrio de las riquezas, pero nunca seré  incondicional de cualquier hombre ni de cualquier partido. Por grande que sea nuestro fervor, por grande que sea nuestra fe, nunca hay que perder la lucidez. Sí, amo este país, amo lo que representa, pero nunca callaré cuando defraude la esperanza que hizo nacer. Prefiero ser la voz de su conciencia que el cómplice de sus errores.

 
 
 
 

Me es difícil creer que los exiliados de Miami aman Cuba como los "del patio", supongo que una parte de ellos debe sentirse divididos, y sobre todo en extremo defraudados por los EE UU. Los cubanos de Miami, no son, ni mucho menos, ricos, y curran como los obreros  US (eso es casi sin  protección social) en las fábricas americanas.        Muchos de ellos se mueren de hambre en la calle. "Ellos" entendieron el interés de desarrollar el turismo (me temo que sea su pérdida), además, Europa y sobre todo el euro (=$) los atrae ahora más que los States.    Tanto es verdad que el porvenir resulta incierto, lo que está seguro es que los cubanos viviendo en la isla nunca aceptarán que  los lobbys de Miami vuelvan como conquistadores después de la desaparición de Castro.        Me parece que Raúl tomará la sucesión, oí también otro apellido (ya no me acuerdo, un moderado creo).        En cualquier caso, el exilio no logrará sacarle jugo al dinero después de votar la muy reaccionaria ley  Helms-Burton.    Esos logros no serán  sacrificados en aras de la apertura post-castrista, los cubanos más que otros ya entendieron la situación de la ex Unión Soviética, y no quieren que lo mismo ocurra en su país.    Sí, un apoyo incondicional del pensamiento de Guevara. Sé muy bien, como tú, que fue mutilada para favorecer imperativos económicos. Sin embargo, su sistema me parece el más justo que pude comprobar. En relación con lo que esperan de nosotros en nuestro sistema podrido y triturador de humanos, es para mí una alternativa positiva , educación y salud siguen siendo una prioridad para los dirigentes cubanos, eso les honra.      Mortalidad infantil en Brasil: 57 por 1000                                en  Cuba: 10 por 1000                             en Francia:   7 por 1000      Supongo que conoces esas cifras, ellos bastan para hacer válido el sistema.  Hasta la victoria siempre.  François.

 

Tu página descubre que tu entusiasmo por Castro y el Che no tiene más que un origen: Odio hacia los Estados Unidos.   Tu página está llena de mentiras y contradicciones. Es mentira decir que Castro estableció la igualdad entre los cubanos o que rescató el sentimiento de la nacionalidad.   Pero sólo te comentaré una cosa: Tu comentario sobre la bandera es totalmente falso.   El movimiento de Narciso López era un movimiento anexionista y buscaba unir Cuba a los Estados Unidos. La actual bandera cubana es la de ese movimineto anexionista y la estrella simboliza el nuevo estado de los Estados Unidos en que se convertiría Cuba.   Juan Franquiz  17.10.1999