Fidel Castro incorpora al Beatle asesinado a su Revolución

 ANGEL TOMAS GONZALEZ. Especial para EL MUNDO
 LA HABANA.- La bota del pie derecho de Fidel Castro marcaba discretamente el ritmo de la canción Imagine que cantaba una representación del Coro Nacional de Cuba. Unos minutos antes, Castro y el cantautor Silvio Rodríguez habían retirado la sábana que cubría la escultura de un John Lennon sentado, en un banco del parque de la calle 17, en el barrio habanero del Vedado, como si fuera uno de esos cubanos que no se dejan gobernar por la premura del tiempo y que mantienen la costumbre de charlar con los amigos a la sombra de un árbol. Algo más de 3.000 personas asistieron al acto de homenaje al ex Beatle 20 años de que fuera asesinado. Tras los discursos políticos que le dieron a John Lennon la identidad de ser un revolucionario opositor «de las desdichas del capitalismo» y de que Silvio Rodríguez cantara en inglés Love acompañado por una orquesta de cámara, Fidel Castro dialogó con la prensa. Había entre la multitud reunida en el parque de la calle 17 muchos cubanos que habían vivido su juventud en los años 60.
En Cuba entonces, que tenía una Revolución de estreno, hubo una corriente política que prohibió escuchar la música de Los Beatles por considerarla una nociva «penetración ideológica» del imperialismo. La gente de esa generación, al ver ahora a Castro inaugurando un monumento a Lennon, no podía disimular el asombro ante un suceso que ni siquiera había sido imaginado como fantasía y que de pronto era una realidad palpable.
«No tengo la culpa», alegó Fidel Castro al comentar la censura a la que había sido sometida la música de Los Beatles. «En aquellos tiempos teníamos tanto trabajo que realmente nunca los escuché mucho», añadió y quizás a modo de disculpa dijo además: «También entonces todos éramos menos cultos que hoy». Después de alabar el pensamiento, las ideas y la poesía de John Lennon, el presidente cubano confesó, que lamentaba mucho no haber conocido antes al músico.
Horas después de la inauguración del monumento a Lennon, al que los discursos oficiales le otorgaron visa de residencia permanente para vivir en una sociedad (cubana) que lucha por «la Justicia que él soñó», se celebró un concierto en la Tribuna Antiimperialista José Martí. Allí, en el escenario donde se desarrolló la batalla oral por la repatriación del niño Elián, los músicos cubanos interpretaron en inglés una buena parte del repertorio de Los Beatles.
Miles de jóvenes vestidos con atuendos de raperos y rockeros corearon a gritos las canciones que no pudieron cantar públicamente sus padres.
En Cuba, por lo general, nunca hay premura por nada. La tolerancia oficial al parecer no escapa de esa regla. La rehabilitación de Lennon y Los Beatles sólo se demoró unos 30 años.

http://www.el-mundo.es/diario/cultura/10N0125.html

El Comandante en Jefe Fidel Castro se declaró este viernes un soñador como lo fuera el afamado cantautor británico John Lennon, a quien se rindió homenaje en la capital cubana en el vigésimo aniversario de su asesinato.
Lennon no se conocía mucho por todo nuestro pueblo, una parte de los jóvenes lo conoce, pero generaciones enteras no sabían tantas cosas bellas de su vida, su pensamiento y su historia, y ahora tendrán la oportunidad de conocerlas, dijo a la prensa el líder de la Revolución.
Se refirió al libro que le fue entregado, el cual profundiza en la vida del mundialmente popular ex Beatle, y señaló que su publicación en Cuba permitirá acceder a una más amplia información sobre las ideas de Lennon.
Tras asistir a la ceremonia de homenaje en un céntrico parque capitalino, Fidel confesó a los periodistas que se siente joven en las ideas y el pensamiento, más entusiasta que nunca, y con capacidad para soñar, y expresó que esos son síntomas de juventud.
El Comandante en Jefe, junto al cantautor Silvio Rodríguez, develó una estatua en bronce, a tamaño natural, del ex integrante de Los Beatles, en el parque de 17 entre 6 y 8, en El Vedado.Ricardo Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, al hablar en la ceremonia dijo que este lugar será, para siempre, un testimonio de lucha, una convocatoria al humanismo.
Añadió que constituirá también homenaje permanente a una generación que quiso transformar el mundo y al espíritu rebelde, innovador, del artista (Lennon) que ayudó a forjarla y al mismo tiempo es uno de sus símbolos más auténticos.
Recordó que en un memorable concierto de 1963 Lennon pidió a quienes ocupaban las butacas más caras que en lugar de aplaudir se limitaran a agitar sus joyas, y seis noviembres después devolvió la Orden del Imperio Británico, en protesta por la agresión a Viet Nam y la intervención colonialista en Africa.
Significó el aporte personal de Lennon, que perduró más allá de la disolución de Los Beatles, con canciones que conforman el más completo inventario de la porfía colectiva de los jóvenes por la paz, la revolución, la emancipación de la mujer y la igualdad racial.
Expresó que Lennon fue objeto de la más intensa y obstinada persecución por el FBI, la CIA y el Servicio de Inmigración de Estados Unidos, instigados directamente por Richard Nixon, al que calificó como el más tramposo de los inquilinos que ha tenido la Casa Blanca.
Dijo que esas agencias mantienen todavía en secreto las pruebas del acoso que desataron contra el intérprete y compositor y que, según unas pocas revelaciones, se conoce que en un solo año, de 1971 a 1972, los informes secretos de sus espías acumularon 300 páginas y un expediente de 26 libras de peso.
Destacó cómo en la década de los años 60 el cuarteto de Liverpool entonaba baladas de amor con verbo proletario, mientras los cubanos desafiaban desde su isla al monstruo imperialista.
Defenderemos el sueño conquistado y lucharemos para hacer realidad todos los sueños, no lo van a impedir tormentas ni piratas, y navegaremos hasta alcanzar el mundo nuevo que sabremos construir, proclamó Alarcón.
El emotivo acto, al que asistieron cientos de admiradores de Lennon y demás integrantes de Los Beatles, incluyó además de la develación de la estatua del artista José Villa, la interpretación por Silvio Rodríguez de la canción Love, acompañando de las orquestas de cámara Música Eterna y Barroca del ISA.
También el guitarrista Luis Manuel Molina y el Coro Nacional dirigido por Digna Guerra intervinieron en la velada, en la cual los asistentes se deleitaron con las melodías Yesterday e Imagine, aplaudidas por la multitud que colmaba la instalación.
Francisco López Sacha, presidente de la Asociación de Escritores de la UNEAC, al evocar a Lennon afirmó que este no solo fue un hombre de gran talento, sino también el inconforme que se manifestó contra la injusticia, y su obra constituyó un canto a la libertad del espíritu humano. 
 

LA HABANA, 12 de diciembre (María de los Angeles González, UPECI) - La develación por parte del gobierno de Cuba de una estatua al desaparecido beatle John Lennon el 8 de este mes en un parque capitalino es interpretada como un insulto a los nacionales que por escuchar la música de ese grupo inglés fueron perseguidos por los comunistas.
Comentarios desfavorables a Fidel Castro con respecto a la estatua de Lennon son escuchados en las calles de la capital, en los ómnibus y otros lugares públicos.
Un miembro de la Mesa de Reflexión que participó en el acto donde se develó la imagen de Lennon, en el parque enclavado en las calles 16 y 6, del Vedado habanero, aseguró: "Soy, por casualidad, unos de los pocos del público que pudo acceder al lugar. Digo por casualidad, porque al comprobar la directiva del evento de la existencia de sillas vacías decidieron ocuparlas con algunos que no teníamos credenciales".
Y el disidente continúa el relato: "Desde adentro pude ver cómo las sillas tenían el nombre de los dirigentes comunistas, como Ricardo Alarcón y Abel Prieto entre otros".
Por su parte, el semanario Orbe publicó en su edición del domingo lo siguiente: "John Lennon ¿asesinado por un fanático enloquecido o por un asesino al servicio del gobierno estadounidense? (...) el gobierno de Washington ha admitido que aún quedan papeles ocultos, aquéllos que -se presume- descubren la relación de cuerpos secretos de Estados Unidos y Gran Bretaña o acuerdos con ese u otro país en lo concerniente al caso, métodos de inteligencia o información federal (...)".
"El Orbe revela la verdadera intención del gobierno de Castro en santificar hoy a quien condenara ayer", dijo Adolfo Fernández Sainz, miembro del Partido Solidaridad Democrática, y víctima por ser fanático de Los Beatles.

Esta información ha sido transmitida por teléfono, ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a Internet. CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como fuente. http://cubanet.org/CNews/y00/dec00/13a1.htm
 

Ricardo González Alfonso

LA HABANA, diciembre - De un titular del periódico Granma: "Inauguran monumento a John Lennon en La Habana".
Lennon nuestro que estás en el parque, con tus gafas y pelo largo, y un silencio Fiscal, pues, como bien saben, los fieles e irreverentes difuntos, y los "fieles" o irreverentes cubanos, carecen -carecemos- del derecho a réplica, y sin embargo...
Lennon nuestro que estás ahora como una contraseña suspicaz y eficaz en un parque de El Vedado, pues ya no estás vedado, y nos enseñas así que todo puede cambiar, canta por nosotros.
Lennon nuestro que fuiste proscrito en Cuba, junto con Ringo, Paul y George, por cantar en inglés y hablar de paz durante la guerra de Viet Nam y las guerrillas del Tercer Mundo, canta por nosotros, quienes siempre te admiramos.
Lennon nuestro, coautor de esperanzas, porque hoy tergiversan tus ideas quienes ayer te excomulgaron en el nombre del hombre nuevo, el diversionismo ideológico y la ofensiva revolucionaria: canta por nosotros, que nunca te negamos.
Lennon nuestro, siempre nuestro; nunca de ellos, aunque te erijan monumentos, pinten y vendan tus sueños, y estén en tu parque, nuestro parque, con discursos y cantos, cómplices -ya sin protestas- aunque tengan el pelo largo, muy largo, tanto como el que tú usabas y a mí me cortaron, canta, canta por nosotros.
John Lennon que estás en el parque, quien junto a tus compañeros de canciones e ilusiones pediste disculpas por declarar que eran más famosos que Cristo, perdónalos, aunque ellos, tus neoadoradores gubernamentales sepan muy bien lo que hacen y deshacen contra nosotros, y contra los hijos de nuestros hijos. Amén.

Esta información ha sido transmitida por teléfono, ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a Internet. CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como fuente. http://cubanet.org/CNews/y00/dec00/12a11.htm