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| Un día viajando en la ruta 44 hacia el pueblo
de Aguacate, después de
pasar San José de las Lajas, mi hijo leyó un cartel que decía; Centro de Inseminación Artificial Rosafé Signet, como en Cuba le ponían el nombre de un mártir a todas las entidades del Estado y como allí todo le pertenece, pues casi todo lleva el nombre de algún muerto, ya sean barcos, escuelas, hospitales, campamentos, etc., etc., entonces como niño al fin y llevado por la curiosidad, me preguntó quién era ese mártir cubano llamado Rosafé y en cual batalla había muerto, entonces le tuve que contar esta pequeña historia, que muchos jóvenes desconocen. Rosafé fue un hermoso toro que se compró en Canadá, allá por el año 67-68, fue traído con el propósito de desarrollar a una ganadería que había sido diezmada en pocos años, las vacas Holstein y Santa Gertrudiz fueron sacadas poco a poco de nuestro panorama ganadero, ya que tenían desviaciones ideológicas y eran muy presumidas, eran vacas de distintos colores y esto no le gustaba al caballo que aspiró siempre a tener un pueblo uniformado, entonces haciendo gala de sus dotes como veterinario y ganadero, orientó hacer varios cruces de razas entre ellas usando a la Cebú, para llegar a la que él bautizara como las F1, F2, F3 y así sucesivamente, calculando que obtendría vacas lecheras y de carne con estos experimentos, aspirando que cuando se llegaran a las F100, F105, F111, pues estas al ser de mas desarrollo tecnológico, darían una producción directa de yoghurt, mantequilla, queso crema, queso patagrás y las mas avanzadas, con una alimentación basada en el café que sembraría en el Cordón de La Habana, dieran café con leche directamente y las que se alimentaran con el cacao que hoy se produce por millones de quintales en el pueblo de Imias, pues darían un buen chocolate caliente en invierno y helados en el verano. De verdad caballeros que el caballo tenía buenas intenciones, lo que pasa es que el infeliz es un incomprendido, nadie lo entiende y los cubanos somos unos malagradecidos, coño que se le habrá ocurrido al tipo cuando importó bueyes de agua de Viet Nam?, pobres animales, se jodieron porque en Cuba escaseaba el agua para las personas. La cosa es que el caballo se vistió con su mejor uniforme ese día y al descender de la escalerilla del avión Rosafé le dio un abrazo, gesto que la multitud congregada en el aeropuerto José Martí, premió con un prolongado aplauso, mientras coreaban consignas y vítores que les habían orientado, después del desfile ante la banda de música, el toro y el caballo recorrieron toda la ciudad saludando al pueblo, a bordo de un auto decapotado, mientras a todo lo largo de su recorrido, podían leerse lemas que decían "Fidel y Rosafé, el presente es de lucha y el futuro es nuestro" Después de una bien organizada y merecida recepción, Rosafé fue conducido hacia lo que sería su hogar, una casa de campo en San José de las Lajas, con aire acondicionado y música indirecta. Luego de darle las instrucciones a todo el personal que allí laboraba sobre la importancia de nuestro distinguido huésped, el caballo se retiró a ocuparse de otras tareas tan importantes que tenía en desarrollo, como lo era El Cordón de La Habana, prometiendo que pasaría frecuentemente para supervisar los trabajos realizados e impartir nuevas orientaciones a los especialistas y veterinarios. Al día siguiente llevaron a Rosafé para que montara a una vaca cubana, y esta no soportó el peso de aquel enorme animal, entonces el caballo orientó preparar una vaca artificial para el experimento y se retiró nuevamente. Se puso en función de aquella tarea a toda la provincia de La Habana y ese mismo día se terminó de confeccionar un simulador de vaca de tamaño natural, que el toro asimiló con sumo placer, mientras los inseminadores colectaban el semen en una vagina artificial y partieron corriendo para el laboratorio. Todo fue un éxito y con ese semen se inseminaron doscientas vacas, todo lo que informaron al líder al día siguiente por medio de un informe bien redactado por el Secretario del Partido del Centro. Entonces el líder que mas sabe en el mundo se puso a sacar cuentas mentales y dedujo que si en diez días se inseminaban 2000 vacas, en un año Cuba sería una potencia ganadera. En medio de un espontáneo mitin que siempre hacen los tarugos a su alrededor, les dijo que esa era una tarea de choque del Partido y que sobre ellos descansaba la responsabilidad del desarrollo de la ganadería en nuestro país. Esa noche, se quedó de guardia el Secretario del Partido atendiendo al ilustre visitante y siendo de madrugada llevó a Rosafé para el área de monta y allí volvió a ordeñarlo. Al día siguiente se le informó al caballo que se habían inseminado 400 vacas y el jefe sin poder ocultar su alegría, se quitó el Rolex y se lo regaló al Secretario por los logros obtenidos, después se quedó de guardia el Secretario del Sindicato y de madrugada hizo lo mismo y nuevamente la acción fue premiada, pero ahora con una moto MZ con side car, entonces cuando llegó el turno de la guardia del Secretario de la Juventud, el tipo quería romper todas las metas y se pasó toda la noche masturbando al infeliz toro que ya no se podía parar, le enseñaba revistas pornos de vaquitas cubanas, le ponía supositorios, pero nada de esto lograba excitar al infeliz animal que no estaba acostumbrado a esos trajines de las tareas de choque, y esa misma noche le dio un infarto al pobre toro, entonces el Secretario de la Juventud muy asustado acusó a la CIA de algún atentado y esta fue la versión que se le dio al comandante. Fue así como Rosafé se convirtió en Mártir de la Revolución y en honor a él, ahora el centro lleva su nombre como homenaje por la lucha que desarrollo en favor de los pobres, el pueblo sin embargo, nunca vio llegar la carne ni la leche, se perdió el yoghurt, el queso y en el país casi no queda animal. De todas maneras como mi hijo era muy pequeño, le dije al final del cuento, que todo había sido broma mía, que la realidad era otra y que el camarada Rosafé había sacrificado su vida en una Misión Internacionalista, por eso aquel centro lleva ahora su nombre, digo, si es que no lo han vendido a corporaciones. Nada, el tipo es un incomprendido que no tiene suerte y de verdad caballeros, hay que reconocer que la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana, es la mejor del mundo entero, miren que aprendió ese caballo allí. Esteban Casañas Lostal.
Montreal, Canadá
13-08-1999
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