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Hace cuarenta y dos años que utilizan la misma cantaleta para engañar
a otros pueblos, principalmente a los infelices con bajos niveles de educación,
sin embargo, supongamos que todo funciona a las mil maravillas.
Supongamos primero que en Cuba existen las mejores escuelas del mundo,
que los educandos pueden estudiar las carreras que seleccionen sin ser
discriminados por su ideología, no solo por eso, que no los afecte
las inclinaciones políticas de sus padres. Imaginémonos por
un instante, que a los muchachos no se le confecciona un expediente para
uso político desde que entran a la primaria. Pensemos que en la
educación cubana nunca se ha cometido fraude, que sus dirigentes
nunca han manifestado que las universidades son solamente para los revolucionarios.
Pensemos que todo es perfecto y servirá de ejemplo a muchos países,
que se tiene la libertad de leer a cualquier escritor, y por último
recalquemos que la educación es gratis, echemos a la basura todo
eso que dicen de la plus valía, consideremos que es así,
que todo es perfecto.
Supongamos que los hospitales son una maravilla y que la cacareada potencia médica existe, olvidemos que no hay medicinas y culpemos al bloqueo, olvidemos el dinero gastado en gerritas por todos lados dirigidas por el Comandante entre trago y trago. Olvidemos que el país fue llevado a la mendicidad y que unos payasos pastores recogían toda la porquería que le sobraba a los americanos y canadienses en sus garajes. Olvidemos que los médicos fueron convertidos en yerberos. No tengamos en cuenta que los dirigentes se preocuparon sus propias clínicas, olvidemos que no confiaban en los "mejores" hospitales, señores, en la salud también todo es perfecto. Olvidemos los sacrificios a que ha sido sometida la población durante cuarenta años para lograr unas medallitas, olvidemos que con esas medallas no se conseguía jugos para nuestros hijos cuando se encontraban enfermos, olvidemos también que le retiraban la leche cuando cumplían los siete años. Olvidemos por un instante que esos atletas nunca han trabajado, que siempre han sido grandes consumidores de la sociedad, que son falsos amateurs porque reciben un salario por competir. Olvidemos que son ellos los que se encuentran comprometidos con su pueblo y no lo contrario. Olvidemos que todas esas inversiones exageradas se realizaban por un problema político y no por amor al deporte, olvidemos que el estado considera a los deportistas propiedades. Consideremos entonces también que todo es perfecto. Como vemos, es perfecta la salud, es insuperable la educación y en el deporte Cuba es campeón hasta cazando lagartijas, pero, y siempre en la vida hay peros que valen, supongamos también que hay seres a los que no les interesa el deporte para nada, supongamos que ese ser nunca se enferma y no ha hecho uso de los hospitales, supongamos además que terminó sus estudios, o no estudió porque no le dio la gana, o sencillamente era un burro pero que el uso de esas escuelas es limitada vista desde cualquiera de estas condiciones, entonces; """" CABRONES COMUNISTAS QUE OTRA OPCION LE OFRECEN A ESTOS CIUDADANOS PARA LA VIDA. """ Muchos de mi generación son ancianos prematuramente, muchos han muerto y no llegaron a ver el final, se quedaron con los deseos de ver el futuro para el cual trabajaron, un pueblo que no puede entrar a los hoteles, que depende de la moneda del enemigo y pobre el que no la tenga, un país de diplomercados, diploputas y diplotiendas, esa es Cuba. Esteban Casañas Lostal.
Montreal..Canadá
7-3-2001. |