Una nueva edición
de 'Tres tristes tigres' celebra los 70 años de su autor, Cabrera
Infante
ÁNGEL S. HARGUINDEY, Barcelona
Con una edición especial de la obra más emblemática
de Guillermo Cabrera Infante, Seix Barral celebró ayer el cumpleaños
de su autor. "Ciertas novelas de horror y de intriga llevan la indicación,
muchas veces apócrifa, de que no deben leerse de noche. Tres
tristes tigres , o TTT si lo prefieren, tendría que cruzar
una banda sobre la cubierta que diga: Debe leerse de noche, porque
el libro es una celebración de la noche tropical", señala
el autor en el prólogo de la nueva edición.
TTT es un libro con una complicada y tortuosa historia: obtuvo
el premio de novela Biblioteca Breve de 1964, pero no se publicó
por primera vez hasta 1967, tras una larga negociación con la censura
franquista en tiempos en los que el responsable del ministerio correspondiente
era Manuel Fraga Iribarne.
"La censura", señala Cabrera Infante, "impuso 22 cortes de todo
tipo: por ejemplo, uno de los personajes estudiaba en una academia militar
y pasó a estudiar en una academia, sin más. Todas las veces
que aparecía la palabra 'tetas' se sustituía por 'senos',
'pechos' u otros sinónimos. Al monólogo final de una mujer
desquiciada le faltan 15 o 16 líneas. El tono del mismo era muy
antirreligioso y, tras la indicación del censor, la obra acaba con
una rotunda frase que, por otra parte, celebré: "Ya no se puede
más".
Publicado dos años largos después de haber conseguido
el premio, y con su autor exiliado en Londres, vivió su pimera desaparición
pública en 1968, a raíz de unas declaraciones anticastristas
del escritor. En 1970 vuelve a ser distribuido, aunque no verá la
luz pública en su edición íntegra hasta 1989. Pese
a ello, y por unas discrepancias literarias con el entonces responsable
de la editorial, no tendrá una distribución comercial normal
hasta 1997, año en el que su autor obtuvo el Premio Cervantes de
Literatura. Con la edición presentada ayer por el director de la
editorial, Basilio Baltasar, se restablece la normalidad en la relación
del libro con sus lectores.
"Creo que el libro funciona como una suma de la vida habanera de los
años cincuenta. Por eso incluí desde una novela psicológica
sobre Laura Díaz, a Ella cantaba boleros , una amplia referencia
al rito inicial fundamental de los Abakuá y la presencia constante
de la música cubana. Aunque pueda parecer pretencioso, mi intención
era incluir todo esto", señala Cabrera Infante.
Una de las novedades de la nueva edición de TTT es una
sobria y sincera autobiografía. En ella se deja constancia de los
hechos y personas esenciales en su vida, además de un tierno homenaje
a Offenbach, el siamés que se convirtió "en uno de
mis mejores amigos, la relación más profunda que ha tenido
con un animal este amante de los animales". En la presentación estuvieron
presentes Carmen Balcells, su querida y emocionada agente literaria; el
académico Pere Gimferrer, y los amigos personales del matrimonio
Cabrera Infante Germán Puig, Marta Pessarrodona, Valentí
Puig y Luis Gasca, entre otros.
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