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SIDA y paludismo acosa a los pobladores de Moa

SANTIAGO DE CUBA, 19 de octubre (Juan Carlos Garcell, APLO) - Luego del brote de paludismo que se detectó el pasado mes de septiembre en el municipio Moa, de la provincia Holguín, ahora los pobladores de ese lugar están consternados por la detección de un número no precisado de casos de SIDA.
Las autoridades sanitarias mantienen en secreto la cifra exacta de los infectados, pero médicos de la zona están alertando a sus familiares y amigos sobre la existencia del flagelo.
Gran cantidad de individuos, principalmente jóvenes, jineteras (prostitutas que cobran sus servicios en dólares) y estudiantes, están siendo sometidos a pruebas de laboratorio para detectar a los portadores del virus.
La juventud cubana es el segmento poblacional de mayor riesgo respecto al SIDA, porque recurre al sexo como única manera de esparcimiento, ya que la escasez generada por la crisis económica les impide realizar actividades recreativas.

 Esta información ha sido transmitida por teléfono, ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a Internet. CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como fuente. 
http://cubanet.org/CNews/y00/oct00/20a4.htm
 

20 de octubre de 2000


 
Un camino para sobrevivir en la desesperanza

SANTIAGO DE CUBA, diciembre - Mujeres que se pierden en los laberintos de la vida en Santiago de Cuba, víctimas del hambre y de la desesperanza, rondan por las calles de esta ciudad en horas de la madrugada, de cada madrugada. La infelicidad se pone al descubierto en la intimidad de sus desventuras y en el desprecio de un segmento de la sociedad por sus actos.
Cuando la noche se hace vieja, mujeres jóvenes, con maquillajes frescos y seductores vestuarios casi siempre negros, desnudan sus intenciones, palpan la oscuridad, porque necesitan amparar sus figuras y sus almas con el abrigo de la moneda. La mayor aspiración de sus paseos es encontrar turistas extranjeros que paguen por el valor del ofrecido cuerpo. Si esto no ocurre y la jornada casi concluye sin provecho van, como último recurso, a conquistar un galán cubano, pues la regla del oficio es: "no volver a casa con las manos vacías".
Muchas son las anécdotas callejeras que cuentan las degradantes modalidades usadas durante los contactos sexuales para complacer a los hombres, en su mayoría europeos, y que son ejecutadas por la tentación de obtener mayor provecho material. La corrupción se impone.
La prostitución fue criticada fuertemente por el actual gobierno de la Isla cuando llegó al poder en 1959. En aquel entonces, se ordenó la eliminación de los prostíbulos, se prohibieron esas prácticas y se prometió amparar a esas mujeres de las que se dijo eran víctimas de la sociedad burguesa.
Pero hace algunos años en el país surgió un grave fenómeno social llamado "jineterismo", que tiene su origen en las mismas entrañas del engranaje económico, político y social existente.
Por su parte, las autoridades están impotentes ante la explosión de las jineteras y recurrieron a las leyes y a las cárceles para tratar de controlar el escándalo.
No obstante, el fenómeno persiste y hay quienes opinan que se extiende. Las jineteras son perseguidas, principalmente, porque su existencia muestra al mundo que la sociedad socialista no es buena y que ellas resuelven ciertos problemas y calman las necesidades elementales del ser humano prostituyéndose, pero sin la ayuda del paternal Estado.
La vida de la mujer cubana es difícil. Son muchas las que optan por el comercio de sus cuerpos como única salida, como forma de sobrevivir en una sociedad hostil y desesperanzada.

Milagros Beatón, APLO
11 de diciembre de 20000

Esta información ha sido transmitida por teléfono, ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a Internet. CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como fuente.
http://cubanet.org/CNews/y00/dec00/11a11.htm
 


 


 

Sólo les queda el llanto y el silencio
(Testimonio de una "jinetera")

LA HABANA, enero - Jóvenes cubanas arrestadas presuntamente por ejercer la prostitución permanecen en Villa Delicia, una prisión situada frente a la cárcel de hombres Valle Grande en el municipio La Lisa. Se trata de una serie de barracas cuyas paredes son de concreto, los techos lo conforman tejas de fibrocemento, así como ventanas y puertas con rejas. Todo el lugar está rodeado por alambradas y guardia permanente. Visto de lejos recuerda los campos de concentración de los filmes soviéticos.
Cuando las supuestas prostitutas ("jineteras" en el argot popular cubano de hoy) son llevadas a ese centro penitenciario son interrogadas, se les retiene joyas, dinero u otros artículos personales si los tuvieran, se les obliga a desnudarse y entonces viene la famosa "cuclilla".
La cuclilla consiste en que las presas tienen que permanecer completamente desnudas y acuclilladas hasta que se les ordene pararse. "Supongo que buscan algún tatuaje en nuestro cuerpo o drogas escondidas en la vagina o el recto", opina Gema, de 18 años, y fuente de esta información. Ella estuvo confinada en esa instalación de la Dirección Nacional de Cárceles y Prisiones del Ministerio del Interior. "Después de esto te entregan un par de chancletas y te encierran en una de esas naves", continúa.
Posteriormente, a las detenidas se les realiza un chequeo médico y las vuelven a obligar a que se desnuden. Esta vez delante de un equipo médico que supuestamente busca "traumas". También se les toman fotografías, huellas digitales y a las 24 horas de estar en Villa Delicia se avisa a la familia de las confinadas que ellas se hallan allí. "Aunque se les advierte que sólo le pueden llevar una muda de ropa interior, un cepillo dental, cigarrillos y que no se permite entrevistarse con la detenida", revela Gema.
Según la descripción de Gema, cada barraca tiene en su interior alrededor de 30 literas y al fondo hay varias letrinas sanitarias (que no sé por qué ella llama "turcos") y lavaderos para el aseo personal. Para poder bañarse las reclusas son llevadas, en un horario determinado y custodiadas, a un cubículo situado en el exterior de las naves.
"Dos mujeres uniformadas cuidan la puerta enrejada de cada barraca. Tratan a las presas a base de burlas, provocaciones e insultos", indica la fuente.
En Villa Delicia hay un pequeño hospital al que llevan a las prisioneras enfermas luego de mucha insistencia.
En la barraca #4 tienen encerradas a las llamadas "reincidentes", o sea, a muchachas que han sido apresadas más de una vez en los operativos que lleva a cabo frecuentemente la policía para erradicar a las "jineteras". Sin embargo, el fenómeno de la prostitución persiste e incluso hay quienes opinan que va en aumento por día. Según expertos independientes, no es la represión policiaca la que erradica la prostitución, sino mejores condiciones socioeconómicas y una correcta educación.
"Para ir al comedor te conducen fuertemente escoltada. Hay que ir en fila. Los alimentos son pésimamente elaborados pero es obligatorio comérselos aunque estés enferma o inapetente; si no lo haces, pueden considerar que estás en "huelga de hambre", lo cual complicaría mucho más la situación de uno en ese penal", explica Gema.
A las jóvenes que fuman sólo se les permite consumir tres cigarrillos diarios, que son entregados por las funcionarias del orden interior a cargo de custodiar las naves.
Para que las presas beban agua sucede lo mismo, tienen que pedírsela a sus carceleras. Estas traen el líquido de un bebedero situado fuera de las barracas.
Las reclusas de Villa Delicia se visten con la ropa que tenían puesta el mismo día que fueron apresadas por la policía. No importa que haya frío y no tengan con qué abrigarse, así deben permanecer hasta que las trasladen a otra prisión. Sólo se les entrega papel sanitario y un pequeño pedazo de jabón.
Gema precisó que durante su permanencia en ese penal a las jóvenes se les sometía a dos o tres sesiones de interrogatorios caracterizados por el maltrato oral que reciben.
"El penal Villa Delicia ha sido bautizado como 'Villa Desgracia', porque es un lugar donde ahora mismo muchachitas, casi niñas, se encuentran en el peor momento de sus vidas, en la peor de las desgracias: estar encerradas en una cárcel cubana. Sólo les queda el llanto y el silencio, el silencio que existe en torno a lo que sucede en esa prisión", concluyó Gema.

María Elena Rodríguez
30 de enero de 2001

Esta información ha sido transmitida por teléfono, ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a Internet. CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como fuente. 
http://cubanet.org/CNews/y01/jan01/30a5.htm
 


 
 
Castro autoriza la venta de jóvenes

Cada vez es mayor el número de jóvenes que contraen matrimonios con extranjeros sexagenarios en la institución del Ministerio de Justicia  de la calle 23 y 25 en el Vedado, La Habana. El precio de cada acto de compra-venta autorizado por el gobierno de la capital cubana, asciende a 800.00 dólares, según fuentes oficiales.
No obstante, la legislación prohibitiva, las mal llamadas jineteras, continúan vendiendo sus cuerpos por unos pocos dólares, que les sirven para sobrevivir. Luego de la experiencia y el deseo de abandonar la forma de vida escogida, las empuja a decidirse por la aventura de encontrar un marido foráneo que las saque del país. En principio los mejicanos resultaron ser los más interesados, les continuaron los españoles y los italianos y al lucrativo negocio acudieron también los franceses y holandeses.
El éxodo migratorio de los cubanos, en incremento cada año, le preocupa en especial al régimen, quien dedica todos sus esfuerzos para culpar a la Ley estadounidense de Ajuste Cubano, que les permite a estos, la legalización de su residencia en ese país, siempre que logren pisar la tierra americana.
La prostitución, según los más viejos, es un fenómeno social de todas las épocas, pero en Cuba se practica entre adolescentes de edad escolar. Los lleva a la prostitución y a la venta de actos pornográficos, la necesidad de escapar de una realidad cargada de una ideología hostil y la diferencia social entre los que poseen dólares y los que no pueden conformarse con un salario de 200 pesos, equivalentes a 10 de los billetes verdes.
La policía cubana, al parecer, dejó de ser tan represiva y permite que frente a sus propias narices se comercialicen estas y mujeres y hombres. Una prueba de ello lo demuestra la presencia de prostitutas y protistutos en las inmediaciones de los hoteles "Inglaterra", "Plaza" y "Parque Central", tan solo mencionando los más céntricos, porque "El Marina" de las fueras de la ciudad, es una evidencia de este tipo de tráfico.

María de los Angeles González
Unión de periodistas y Escritores Independientes, UPECI

5 de febrero del 2001

http://www.bpicuba.org/otros/venta.htm
 


 
 
Sobrevivir a cualquier costo es el lema de muchos cubanos

PINAR DEL RIO, febrero - Existe un aumento de los males sociales, principalmente en la adolescencia y la juventud, segmentos donde parece que la labor del sistema de educación establecido por el Partido Comunista de Cuba y de su sociedad organizada no ha sido positiva.
Cada día aumentan vicios como la prostitución, el homosexualismo, el alcoholismo y junto con ellos se resquebrajan los más elementales valores del hombre, tales como la responsabilidad, la honradez y la laboriosidad, entre otros.
Unos culpan de esta situación a las crisis económica, otros a la desatención de los hijos por parte de sus padres e incluso están los que creen que la escuela no efectúa responsablemente su labor o que la sociedad no es el mejor ejemplo.
Lo cierto es que cada vez con mayor frecuencia se ve cómo los jineteros y jineteras asedian a los turistas ofreciéndoles sus cuerpos jóvenes y hermosos a cambio de unos dólares.
Por ejemplo, en Pinar del Río se pueden constatar esas escenas en derredor de la fábrica de tabacos, del hotel Pinar del Río y en el kilómetro 13 de la carretera de Viñales, lugares considerados como "puntos para jinetear".
La prostitución es el vicio que más se hace notar y que crece día por día.
¿Por qué?
Porque para los jóvenes el estudio o el trabajo honesto ha perdido todo su mérito, en país donde una noche de servicios sexuales puede dejar ganancias muy superiores a las del salario anual de un profesional.
Ahora, se suele oír a muchos padres como elogian la manera "emprendedora" en que sus hijos se "buscan los pesos". Ya poco importan en muchos sectores de la sociedad cubana el honor, la decencia o cualquier cuestión de índole moral. El lema es sobrevivir a cualquier costo.

Víctor Rolando Arroyo, UPECI
17 de febrero de 2001

Esta información ha sido transmitida por teléfono, ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a Internet. CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como fuente.
http://cubanet.org/CNews/y01/feb01/15a7.htm
 


 
 

La Habana, 22 de Agosto de 1997, Cuba Press.

Bienaventuradas las que cobran en pesos...

Las putas pobres llegaron más tarde.

Hacia el invierno de 1995, venían de los mismos barrios y poblados de donde surgieron las vistosas jineteras internacionales, pero sin ropa de marca, menos favorecidas por la naturaleza, sin el ingles de one, two, three, y con gigolos municipales y desarrapados, bebedores de chispetren, gualfarina y salta pa tras! Merodean los paladares que venden bebidas alcohólicas, las casas de juegos clandestinas, los cabarets disimulados donde triunfan Olguita Guillot y Celia Cruz y a regresado fabulosamente Ana Linares y Gloria Estefan estreno Mi Tierra.

Es el mundo virtual de los claretes criollos, siempre exuberantes, con las unas mas largas que los de Sao Paulo, mas maquillaje que Rosita Fornes y mas locas que las vacas britanicas. En ese universo celestial, no en el centro, sino también en las margenes, han establecido sus tiendas de harapos, las jineteras nacionales. Están haciendo el fuerte en los mercados campesinos, en los cabaretuchos de barrios y en los clubes nocturnos, que han sobrevivido a la ofensica revolucionaria, una especie de delirio marxista que ataco a los dirigentes comunistas en 1967 y produjo el sueno dorado de convertir La Habana en el Pyongyang del Caribe.

Divaguean en toda la ciudad y en pequeños focos en las provincias donde se mueve el dinero cubano y la gente que no coge lucha, borra con ron, pastillas y mariguana la tierra, en realidad el país y su cantera de guerra. Pasar una noche con una nacional sale entre 300 y 350 pesos, para algunos, como se dice en Cuba, "esta en precio".

Ricardo Medino, un panadero de 19 anos, cree que todavía es un poco caro, el salario medio oficial en este país es de 203 pesos, el panadero debe de andar por los 150 pesos. Una jornada de amor intenso le costaría el sueldo del mes. Para Juan Arango, desempleado de 42 anos, el arribo de las jineteras patrioticas crea otros conflictos, les están haciendo la competencia a los homosexuales.

Hay luto en el Parque de la Fraternidad, que es la zona donde mas pájaros se reúnen sin despreciar el Paradero de La Víbora. Es una competencia donde ellas, claro, llevan la mejor parte. Los homosexuales otra vez discriminados y en el latón de basura. La tarifa de las mujeres de moneda nacional delimitan muchas actividades y funciones. En este sentido hay un elemento decisivo que diferencia el grupo de sus colegas de trabajos, las relaciones internacionales. Se trata de que entre las pobres hay muchas jovencitas, desde los 12 anos, por ejemplo, pero la mayoría son mujeres que pasan de los 30 anos y algunas, en numero importante, están en los 50.

En la estación de trenes de Cristina, en la Plaza de Cuatro Caminos, esta operando Aida. Llego de la región de Bayamo, unos días después del Ejercito Rebelde de 1959. Era una niña bonita y un poco loca. Se metió en un cuartico en la calle Lindero, trabajo en una fabrica y vivió sus sucesivos, febriles y fugaces concubinatos de los que quedo una hija que ya esta casada y vive en otro barrio de La Habana. Empece a salir con gente del campo que vienen a traer animales y viandas a la Plaza, primero para divertirme y comer, porque el dinerito de friegaplatos en el restaurante estatal no me alcanzaba para nada. Después me di cuenta que allí estaba perdiendo mi tiempo, y me dedique de lleno. Al mediodía vengo para aquí, y ya empiezan a caer los puntos, sobre todo guajiros, un poco viejones o muchachitos que traen cosas para vender. Yo cobro por tiempo completo 100 pesos y desde luego, los gastos, una cervesita, y una caja de comida. Si es algo mas rápido, no vayan a poner los nombres vulgares, ponle los nombres finos, esos que usan uds., les pido 20 pesos y aquí no ha pasado nada. Hay muchas mujeres metidas en esto por miles de razones, yo te cuento las mías. Tengo mi clientela casi fija. A veces viene una niñita de esas y me jode una cuadra, pero yo me pongo en mi lugar, la carne fresca es la carne fresca. Nunca pienso en lo que estoy haciendo, ni si es bueno o es malo, ni en la moral ni nada de eso. Estoy viva y tengo salud, no voy a pasar hambre y necesidad, yo hago las cosas para alante. A veces yo sola digo, "Aidita mira para eso, en la que te haz metido". Pero yo me tomo un diasepan, me viro para el otro lado y me duermo".

Raul Rivero, Director de Cuba Press. 

Trabajo especial del libro "Pruebas de Contacto".

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