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| Amigos....
En mi reciente viaje a Miami, tuve la oportunidad de encontrarme con varias personas, que compartimos la casi diaria tarea de llevar a través de este espacio, la realidad que hemos vivido y se vive en Cuba. Entre ellos, tuve el privilegio de conocer entre otros a Roberto Solera, quién me premió con un libro del cual es su autor, tomando más valor para mí, que también me lo dedicara. No demoré mucho en abrirlo, lo hice en el mismo Miami durante los días que disfrutaba de una inoportuna gripe, que me imposibilitaba realizar todos los recorridos que me había propuesto. Desde sus primeras páginas atrajo mi atención, la mención de nombres y situaciones totalmente desconocidas no solo por mí, quién al triunfo de la mal llamada Revolución cubana, solo contaba con diez años de edad, creo, que es desconocida por gran parte de nuestro pueblo, sobretodo, la referente a los inicios mismos de esa llegada al poder por parte de los rebeldes que constituyeron, la esperanza de todo un pueblo. No puedo hacer una crítica sobre el valor literario de la obra, la literatura nunca ha sido mi fuerte, pero si les puedo asegurar, que de una forma amena y agradable, con un lenguaje sencillo, el mismo que utilizamos los cubanos en nuestra vida diaria. Roberto con maestría toma de la mano al lector mas inexperto y lo conduce por esos sucios laberintos de la intriga, y las ambiciones por el poder que mantuvieron las distintas organizaciones revolucionarias, comprometidas durante la lucha contra la tiranía de Fulgencio Batista. Hace gala de una memoria extraordinaria, atrapando del tiempo nombres y situaciones que para muchos serían dificíles de recordar, es una obra narrada en todo momento en primera persona, haciéndole de esta manera más facil la tarea de traernos su mensaje, ya que en todo lo expuesto en este libro, él es su principal protagonista. La historia de los antagonismos entre los líderes de las luchas en nuestro país, tienen sus orígenes desde las primeras guerras independentistas, que se han extendido hasta nuestros tiempos, parece un mal endémico no solo en nuestra isla, abarca todo nuestro continente, solo que ahora, según podemos ver en la obra de Solera, llegan las traiciones a puntos extremos. Allí se encontrará el coqueteo de viejos comunistas con Fulgencio Batista y posteriormente, la traición de éstos a los revolucionarios que pelearon para erradicar todo vestigio de dictaduras en nuestra isla, hasta culminar con la más alta traición, que se ha cometido contra nuestro pueblo, una tiranía mucho más salvaje que todas las sufridas anteriormente. En el período narrado a partir de 1964, época en la que ingresé en el Servicio Militar Obligatorio, a la escasa edad de 14 años, me uno a la historia de Roberto, no encuentro pasajes exagerados ni falsos, es una suma constante de pesadillas, que han llevado al país a su ruina total. Su divorcio de la causa revolucionaria a tan corto tiempo de llegar la revolución al poder, da una clara idea de la visión que poseía en esos momentos sobre el futuro de Cuba. Las arbitrariedades de las que fue víctima, sonarán falsas y huecas para todo el que no conozca a profundidad ese sistema, para los que lo vivimos, sabemos que Roberto no miente en ninguna de sus líneas, porque estas arbitrariedades se profundizaron aun más, hasta nuestros días, donde Cuba es un país gobernado por diarios y caprichosos decretos de su monarca. No solo recomiendo este libro a las nuevas generaciones de cubanos, es util para los que salieron a principios de la mal llamada revolución, será mucho más util también, para aquellos que todavía creen en esa utopía y tienen a Cuba como ejemplo de la sociedad a seguir. Muchas gracias. Esteban Casañas Lostal.
Montreal..Canadá
15-1-2000.
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