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París -- Si el este niño argentino que guindó en Bolivia, el Che --qué pereza escribir ese nombre-- le hubiese tocado vivir en esta época hubiese sido top model; con perdón de los top models, a excepción de la Naomí Campbell, que me cae como un saco de ches juntos, o sea, pesadísima, y no tengo que pedirle disculpas de nada. Y si lo dudan, miren al guerrillero globalizado Marcos, ha hecho de México una pasarela por la que ha mostrado su careta de carnaval terrorista --sólo los terroristas van enmascarados--, la mona combinación militar, botas de tropas especiales; rumbeando hasta la capital, en una guagua muy protegida por cierto, escoltado por no sé cuántos comandantes, que mandan menos que él, que es subcomandante. Y seguido por europeos famélicos, u obesos; mal vestidos no, disfrazados como para hacer de figurantes en Los miserables, llenos de granos, calvos, o peludos, grasientos y sudorosos. A juzgar por las pelambreras de los sobacos, el grajo debió hacer ola en aquella concentración a favor de los indígenas. Pobres indígenas, no es justo, en breve lo poco que tienen se lo pondrán por la libreta de racionamiento. Qué revulsiva es la revolución, con ese look zarrapastroso, y ese mal gusto, y la fascinación por el churre y la cutrería y el acabóse. El día en que Armani e Yves Saint-Laurent propongan una revolución meditaré sobre el asunto. Supongo que los intelectuales europeos no estuvieron hospedados en las carpas de tres por quilo. Manuel Vázquez Montalván y José Saramago debieron andar guindados de la millonancia de algún hotel Meliá, o su equivalente; si es que la embajada cubana no les brindó confortable alojamiento, que para eso sí hay. ¿Y la Danielle Mitterrand, por dónde anduvo ``zapateando'' con sus modelitos de alta costura? La Miterrana gastándoles a los contribuyentes de cualquier sitio, que en eso son especialistas los políticos franceses y su recua de esposas y amantes. A propósito de Manuel Vázquez Montalbán, dice que en Cuba no le han editado su libro sobre el castrismo, pero que uno de los hijos de Castro se lo ha leído; y que la feria del libro habanera es divina porque ``hay riadas de gente sedienta''... Lo de ``sedienta'' no es nuevo, hace cuarenta y dos años de errar con la lengua afuera y pidiendo el agua por señas, es ya viral, de cerebro. Revisando en los periódicos acabo de hallar una foto publicada por el diario español El Mundo, de cuando Marcos era profesor, y tenía ese nombre de Algo Sebastián Guillén, y por supuesto no llevaba careta, o sea, pasamontañas. No sé si se encasqueta capucha por admiración terrorista, desde luego que por feo sí se la pone. Porque es feo con inquina. El día en que se quite el trapo de la cara la reputación con las europeas faltas de rabo encendido rodará por el suelo. Aunque ya saben que eso no quiere decir mucho, no obstante el feo mal genio de la Naomí Campbell triunfó en las pasarelas del mundo entero. Y yo prefiero a un feo de físico que no a un feo de alma. Pero presiento que Marcos acumula fealdad hasta por los codos. Allá el presidente Fox y los mexicanos si se quieren jamar el millo de negociar con los guerrilleros; la tuerca se la irán apretando mientras más concesiones hagan, y acabarán como los cubanos, los nicaragüenses y los venezolanos: exiliados en Miami. Mejor para Miami, así entra plata y la ciudad sigue creciendo en mestizaje y en riqueza. Estoy a favor de los indígenas y el reconocimiento de su cultura y de sus demandas sociales. Pero, ¿es Marcos indígena? No. ¿Habla Marcos alguna lengua indígena? No. ¿Cómo comunica Marcos con los indígenas? No lo sé, pero me lo imagino. ¿Y qué hace Marcos de líder de los indígenas? Lo que hace es lucirse. ¡Cómo le encanta a esta gente el lucimiento y hacer de la política el camino a la pasarela! Y de los desfiles populares sus armas de doble filo. Desde que Marcos anda hablando por los indígenas todavía no he visto yo a ningún indígena de verdad dar la cara y mover su lengua por su causa en ningún artículo de la prensa mundial. Definitivamente los guerrilleros están on top, resulta que Armando Guerra --para no mencionar su nombre y evitar el egbó de... lengua-- ¡ha sido nominado al Nobel de la paz! Después del escándalo Rigoberta Menchú, que me sale hasta en la sopa; y que es indígena pero también muy mentirosa, para desgracia de los indígenas, nada me extraña. Así que Armando Chanchullo, el tipo que más guerras se ha obstinado en desatar en los últimos tiempos es nominado... Pero, bueno, Dios mío, Chico, me estás fatigando ya con las rudas pruebas que me envías: ¿Y los trece días que mantuvieron al mundo en un hilo cuando lo de los cohetes? ¿Y las guerras en Africa? ¿Y las constantes agresiones a Estados Unidos? ¿Y las violaciones de los derechos humanos? El noruego del Nobel, con todo respeto, que osó mencionar el nombre del dictador cubano para esta nominación de seguro fumó y no invitó. O se está haciendo el sueco. ZOE VALDES
Publicado el martes, 20 de marzo de 2001 en El
Nuevo Herald
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