Siento que todo está cambiando
a nuestro alrededor.
Respiro un aire cada vez mejor,
que exalta el grito de mi corazón
hacia esta región.
Me he despertado susurrando una nueva
canción
y mi ventana se llenó del sol.
Salgo a buscar el hecho y la razón
de tanta emoción.
América despierta nuevamente
y no es que sea feliz su despertar,
pero es que esta mañana se le
advierte
su decisión unida de luchar.
No dejará al destino y a la suerte
la deuda que le tienen que pagar;
enriqueció otras vidas con su
muerte,
hoy renace y al fin ha echado a andar.
Buenos, buenos días, América.
¿Cómo está?
Muy buenas.
Buenos días, América,
buenos días ¿Cómo
está usted?
Buenos días, Brasil, mi gigante,
cuánto tiempo sin ti.
Adelante.
Nicaragua sin Somoza
sigue más hermosa que ayer.
Haití, la negra,
llorando está.
Colombia, Ecuador, Uruguay, Venezuela,
Argentina
van creciendo para hacerlo mejor.
Una larga fila de árboles gigantes
contra el viento del norte, brutal
y arrogante.
Mientras le imploro y lo adulo,
me ha de coger por el cuello.
América mía,
nos va aquí la vida para creer.
La unión de la dignidad
genera la libertad, de una vez.
Colombia, Ecuador, Uruguay, Venezuela,
Argentina
van creciendo para hacerlo mejor.
Me he despertado susurrando una nueva
canción
y mi ventana se llenó de sol.
Salgo a buscar el hecho y la razón
de tanta emoción.
Silvio RODRIGUEZ
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