Una 'extraña pareja' política presentó ayer en el Senado de EE UU un
proyecto de ley para ayudar económicamente a la oposición política y los
trabajadores por cuenta propia del interior de Cuba. El republicano Jesse
Helms, el muy derechista autor de la ley contra las inversiones extranjeras
en Cuba que lleva su nombre, y el demócrata Joseph Lieberman, que fue
candidato progresista a la vicepresidencia con Al Gore, sometieron un texto
para que EE UU envíe en los próximos cuatro años 100 millones de dólares
(unos 18.600 millones de pesetas) a los disidentes políticos y económicos
de la isla.
El proyecto de ley, que cuenta con la bendición del exilio cubano en
Florida, se enfrenta a un grave inconveniente: ¿cómo hacer llegar esa
ayuda a sus destinatarios, cómo impedir que se la quede el régimen? Así
lo subrayó el senador demócrata Christopher Dodd, que se opone a la
medida. 'Vamos a malgastar el dinero en una operación que nunca alcanzará
a sus beneficiarios, porque de ello ya se encargará Castro', dijo Dodd.
En el fondo se trata de un gesto simbólico. Helms y Lieberman, unidos
por la mala conciencia del fracaso de la política del embargo, quieren
demostrar que Washington no tiene nada contra el pueblo cubano. Según su
proyecto, el presidente de EE UU podrá enviar dinero, comidas, medicinas,
teléfonos, máquinas de fax y otros instrumentos a presos políticos y sus
familias, disidentes interiores conocidos, periodistas e intelectuales,
grupos religiosos y pequeños empresarios agrícolas y urbanos que trabajan
por cuenta propia.
'EE UU', según Helms, 'va a ir más allá de su política de aislamiento
del régimen cubano, va a minar la opresión que ejerce Castro sobre su
pueblo mediante una ayuda creativa a aquellos que trabajan por un cambio en
la isla'. 'El debate', dice Dennis Hays, su vicepresidente, 'no debe
centrarse en el refuerzo del embargo, sino en la promoción de un cambio
democrático pacífico en Cuba'. La llamada Ley de Solidaridad con Cuba se
inspira en una medida semejante adoptada en los ochenta con el movimiento
polaco Solidaridad.