El Consejo de Ministros de los países ACP (África, Asia y Pacífico) han
pedido a la Unión Europea que incluya a Cuba en el acuerdo de Cotonoú, que
otorga importantes ayudas y ventajas económicas a sus 77 miembros. La petición,
que fue publicada ayer por el diario oficial cubano Granma, pide que la
UE, tras la reapertura la semana pasada del diálogo político con Cuba, haga
'una revisión sustantiva de su posición común en aras de tratar a Cuba de
manera justa e imparcial'. Los países ACP piden a la UE que 'tal revisión'
conduzca al acceso de Cuba al acuerdo de Asociación ACP-UE.
El Gobierno cubano también expresó esta semana su deseo de que los Estados
miembros de la Unión Europea reflejen el 'buen clima' propiciado por el
reinicio del diálogo político entre la isla y la UE el pasado 30 de noviembre.
Este diálogo quedó interrumpido hace cinco años, cuando a propuesta del
Gobierno español la UE adoptó una postura común que condiciona las ayudas a
Cuba y la firma de convenios con La Habana a señales claras de apertura política
en Cuba.
El martes pasado, las autoridades cubanas consideraron 'positivo' el dialogo
entre Cuba y una troika de la Unión Europea, encabezada por Jan de Bock,
secretario general del Ministerio de Asuntos Extranjeros de Bélgica, que visitó
la isla. Durante este encuentro ambas partes firmaron un documento conjunto que
considera 'que se ha reabierto una nueva etapa en los vínculos entre la UE y
Cuba, y se comprometen a reexaminar las visiones y percepciones recíprocas que
pudieron constituir un obstáculo a la ulterior consolidación de este diálogo'.
Sin embargo, fuentes de la Unión Europea filtraron esta semana que las 'señales
positivas' constatadas durante el diálogo 'no son suficientes' para que los
Quince modifiquen la posición común que es revisada semestralmente desde 1996.
Según las citadas fuentes, Cuba ha avanzado en el terreno de la disminución de
los presos políticos y la no aplicación de la pena de muerte en
aproximadamente dos años, pero la UE espera 'señales' de mayor envergadura,
como la liberación de todos los presos políticos -unos 300, según el
disidente Elizardo Sánchez- y la moratoria o la abolición de la pena de
muerte. Cuba en reiteradas ocasiones ha manifestado que no aceptará
condicionamiento alguno de la UE ni de ningún país como requisito previo para
firmar un convenio. De momento, la postura de Cuba es la de dejarse querer por
los países ACP.