Lunes
8 de abril
de 2002
Cuba acusa a EE UU de repartir radios y folletos subversivos en la isla La Habana implica a diplomáticos
MAURICIO VICENT | La Habana
El Gobierno cubano acusó este fin de semana a Estados Unidos de alentar la
subversión en la isla a través de la representación diplomática que
Washington tiene en La Habana. El encargado de formular las acusaciones fue el
canciller Felipe Pérez Roque, que al intervenir en un acto político en
presencia del mandatario cubano, Fidel Castro, aseguró que los funcionarios de
la Sección de Intereses de EE UU en La Habana se han dedicado en los últimos
meses a distribuir aparatos de radio y folletos subversivos durante sus viajes
por el interior de Cuba. Roque acusó a los diplomáticos norteamericanos de 'organizar, financiar,
abastecer con medios materiales y logísticos y dirigir a los grupos ilegales'
-de disidentes- que EE UU ha formado en la isla. Según el ministro cubano, esos
funcionarios 'alientan a la subversión y a la violación de las leyes cubanas'
y 'conspiran contra la revolución cubana' apoyando a esos grupos, que están
'conectados y estrechamente ligados' a las agrupaciones anticastristas de Miami
que 'alientan la actividad terrorista' contra la isla. Pérez Roque dijo que 'al parecer hay una euforia nueva, un intento de nuevos
planes, de ponerle un extra a la actividad conspirativa', y advirtió a los
funcionarios norteamericanos que su actuación 'viola las regulaciones de la
convención de Viena sobre relaciones diplomáticas de 1961'; 'debe saberse que
nuestra paciencia tiene límites, que nuestro pueblo sabe bien que se está
violando lo establecido con tanta conspiración y trabajo de tergiversación de
la realidad cubana', manifestó. El viernes, la televisión cubana informó de que varios diplomáticos de EE
UU habían repartido radios previamente sintonizadas en las frecuencias 'de
emisoras anticubanas' que trasmiten desde EE UU hacia la isla. Los medios
afirmaron que 'la afrenta más grande' fue la de haber acompañado los aparatos
con un folleto titulado 'Martí en sus propias palabras', en el que se manipula
el pensamiento del héroe nacional de Cuba, José Martí, presentándolo como
contrario al proceso revolucionario cubano. El Gobierno uruguayo, que el sábado llamó de manera urgente a consultas a
su embajador en La Habana, espera una rectificación del Gobierno cubano por las
declaraciones del canciller Felipe Pérez Roque, que considera ofensivas,
informa la agencia Efe. El ministro de Asuntos Exteriores uruguayo, Didier Opertti, definió como
'agravio, deformación y mentira' las declaraciones del ministro cubano, en las
que calificó de 'serviles a los intereses de EE UU' a los gobiernos de
Argentina, Costa Rica y Uruguay, por la decisión de votar contra su país en la
próxima asamblea de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU.
